domingo, 16 de diciembre de 2012

TRES POEMAS PARA UN FIN DE AÑO...

"Llegué a las ciudades en tiempos de desorden,
cuando el hambre reinaba.
Me mezclé entre los hombres en tiempos de rebeldía.
Y me rebelé con ellos."
Betold Bretch


CARTA A UN NIÑO DE LAS GENERACIONES FUTURAS, QUE A LO MEJOR NACERÁ DENTRO DE 8.000 AÑOS, LLAMADO PEDRO:
"Nosotros somos, Pedro, el grano sembrado en la tierra. Es nuestra generación. No germinaremos todos, no pujaremos todos cuando llegue la primavera. Cada una de esas botas herradas que marchan sobre nuestras cabezas puede aplastarnos. Puede triturarnos - por casualidad, de rabia, por placer de destruir- y nosotros lo sabemos. Y vivimos con ese pensamiento. Pero no creas Pedro que eso nos infunde pavor. No pujaremos todos, pero tampoco pereceremos todos. Eso también lo sabemos y esa idea nos acompaña. El murmullo de las espigas en sazón recubrirá las huellas de las tumbas, serán olvidadas, se olvidará todo, la angustia y la aflicción... Sólo la cosecha dirá a tu generación, en nuestro nombre, de los vivos y de los muertos: tomad y comed, este es nuestro cuerpo".
JULIUS FUSIK
Checoslovaco. Ejecutado por los nazis el 8 de setiembre de 1943.


Antes de beber echemos unas gotas
de vino sobre la tierra para humedecer
los labios de los que nos precedieron.
Omar Khayyam



miércoles, 28 de noviembre de 2012


Deuda externa vs. independencia nacional
por Eduardo Mariano Lualdi

PARTE I

El gobierno de los Drs. Kirchner propagandizó durante años que su política llamada de “desendeudamiento” era el mejor camino para garantizar la independencia nacional. Miles de millones de dólares fueron a parar a los bolsillos de los usureros en medio del aplauso de la clak oficialista en desmedro de las necesidades del pueblo. Había que ser "previsible" y tomar el camino de lo posible, en vez de recorrer la senda de lo necesario para el efectiva independencia nacional.
Todas las personalidades y organizaciones vinculadas a la problemática de la deuda externa señalaron lo inapropiado, errado y peligroso de este camino. El reciente fallo del Juez Griesa a favor de los llamados fondos bruitres dejó en ridículo la argumentación sostenida hasta el cansancio por el oficialismo y dio la razón a quienes siempre nos opusimos a favorecer a los usureros internacionales.
Ahora, la Dra. Fernández de Kirchner se ha referido al fallo del Juez Griesa como el producto de una “justicia colonial”. Tiene razón. Pero esa justicia siempre fue así. Díganlo los iraquíes masacrados por centenares de miles por las fuerzas armadas de EE.UU., el Reino Unido y demás socios de la invasión a aquella nación para apropiarse de su petróleo. Y sin embargo fue en la justicia de EE.UU. en donde decidió el Dr. Kirchner confiar los intríngulis de la deuda externa argentina mediante el megacanje Kircner-Lavagna del 2005. Más precisamente a la justicia de Nueva York, cuando el juez Griesa no le resultaba tan patético como lo describe hoy Horacio González en su artículo.
Al dejar en manos de la justicia de EE.UU. los asuntos de la deuda externa de nuestro país, nos comportamos como aquellos que le otorgan al lobo la custodia de su rebaño; nadie debe resultar extrañado entonces porque un lobo como ese se coma las ovejas. Perón le diría a la presidente “así paga el diablo”.
Se demostró que el imperialismo siempre actúa con la lógica del imperialismo y los usureros con la de los usureros: tienen más y quieren más.
En 2002, el Juez Ballestero declaró la deuda externa argentina del período 1976-1982 ilegítima, usuraria y fraudulenta, y envió al parlamento sus considerandos para su tratamiento. Los legisladores nacionales se hicieron los “otarios” –siendo un asunto de su exclusiva incumbencia- , otorgaron poderes especiales al Poder Ejectuvo prohibidos por la Constitución para la negociación de la deuda externa, y celebraron alborozados el nuevo megacanje de 2005.
Ignoraron olímpicamente el fallo del juicio Olmos I, los fundamentos y consistencias del juicio Olmos II y los correspondientes por le megacanje y el blindaje de De la Rúa, todos demostrativos del robo usurario que sufre la Argentina desde hace más de 30 años mediante el recurso de la deuda externa argentina.
El “desendeudamiento” practicado por la administración de los Kirchner significó miles de millones de dólares producidos por el pueblo argentino con trabajo y sacrificio para esos usureros a expensas de desatender numerosas necesidades de la población. Es hora de que el gobierno argentino revierta esta situación.
El camino es  rechazar la deuda odiosa contraída por la dictadura entre 1976 y 1983, investigar la deuda para discriminar la parte ilegítima que se debe rechazar, desconocer toda deuda con el Reino Unido que ocupa nuestras Malvinas y aspira a colonizar más de 5 millones de kilómetros cuadrados de territorio argentino, y poner fin al sistema usurario de opresión de la deuda externa argentina, que como dijo el Alejandro Olmos es una lápida que pesa sobre las espaldas del pueblo argentino. Este es un camino verdadero para la independencia nacional.

PARTE II

Producida la detención de nuestra Fragata ARA Libertad por pedido de un fondo buitre, la presidente de la Nación y el ministro de Economía sostuvieron que no se le pagaría un peso a esos fondos. Esta proclama fue correcta.
Sin embargo, cuando el fallo del Juez Griesa, circuló rápidamente la información de que el gobierno estaría dispuesto a reabrir el canje de bonos como muestra de su voluntad negociadora y pagadora. Esta posición va en el sentido contrario de la primera declaración del gobierno nacional y de la posición de la Dra. Fernández de Kirchner criticando el carácter colonial de la medida de la justicia de EE.UU.
El pago de la deuda ilegítima, fraudulenta, usuraria y odiosa es uno de los hechos que revelan la verdadera política de actual gobierno, revestida de la mentira del “desendeudamiento”.
Es notable el peso que le da la presidente a esta cuestión en sus discursos: “Él decía que los muertos no pagan, que había que vivir, que había que poder producir y trabajar y crear para poder pagar” (presidencia.gob.ar/discursos – 20/05/2012).
 “Nosotros desendeudamos al país como nadie habiendo recibido un país defaulteado y la mayor deuda soberana defaulteada de todo el mundo, en ese marco somos los que más desendeudamos” (presidencia.gob.ar/discursos/4089).
Para efectivizar esos pagos de deuda externa el gobierno de los Drs. Kirchner recurrieron al uso de las reservas del Banco Central, Anses, PAMI, etc., pero los datos publicados por el Banco Central de la República argentina demuestran que, lejos de “desendeudarnos”, pagamos cada vez más y la deuda sigue creciendo.

Datos publicados por el Banco Central de la República Argentina

Deuda reconocida al 31/12/2005 = $128.630 (en millones de dólares)

Deuda reconocida al 31/12/2011 = $178.963 (en millones de dólares)

Deuda remanente al 31/12/2005 = $23.556 (en millones de dólares)

Deuda remanente al 31/12/2012 = $11.177 (en millones de dólares)

Deuda externa Banco Central al 31/12/2011 = 5.000 (en millones de dólares)

Total = (al 31/12/2005) 152.186 (en millones de dólares)

            (al 31/12/2011) 195.140 (en millones de dólares)


domingo, 25 de noviembre de 2012


Evo Morales en el aniversario de la batalla de Suipacha

Bolivia: a 202 años de la heroica gesta
CORRESPONSAL
Como todos los años el pueblo de Suipacha, escenario de la gloriosa batalla librada y ganada el 7 de noviembre de 1810 por nuestro ejército revolucionario, se engalanó de fiesta para conmemorar el 202 aniversario.
Los suipacheños y pobladores vecinos sabían de la noticia que esta vez tendría una particularidad muy especial porque se anticipó que estaría presente el Presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, era la primera vez que un presidente asistía a un aniversario de la Batalla. En la noche del día anterior el pueblo realizó el desfile con teas y posterior serenata con grupos musicales locales y de Tupiza, junto a conjuntos de baile de sus escuelas. A las 9.30 de la mañana del día 7 se escuchó el ruido del helicóptero que traía a Evo Morales Aima desde la ciudad de Tarija.
Al comenzar el acto se cantó el himno nacional de Bolivia y los de Suipacha y Tupiza. Después de saludar a las autoridades presentes, entre las que se encontraban el nuevo Embajador argentino en Bolivia, Lic. Ariel Basteiro y la Cónsul argentina en Villazón, Dra. Reyna Sotillo, el presidente Evo Morales pronunció un discurso que duró un poco más de 30 minutos. Por su importancia y significación de la relación entre la lucha de los pueblos originarios y la Guerra de la Independencia contra España, trascribimos textualmente algunas de sus partes.

La lucha sigue por la independencia definitiva
“En una reunión con el mando militar le he pedido que hay que recordar las distintas batallas libradas en toda Bolivia, allí está la historia, allí está la rebelión de los pueblos de nuestros antepasados por esta Gran Patria, la llamada Patria Grande de Simón Bolivar y otros Libertadores de América y por eso estamos acá participando en el Aniversario de la Batalla de Suipacha de un 7 de noviembre de 1810. El levantamiento de todos los sectores sociales de aquellos tiempos por la independencia de este territorio antes llamado Aby Yala y ahora América.
Si estos cerros y los ríos tuvieran que hablar nos contarían en detalle cómo ha sido la rebelión por la independencia. Es importante recordar permanentemente de dónde venimos, que hicieron nuestros antepasados por la independencia y hoy día la lucha sigue por la independencia definitiva.
Si no recordamos estas luchas podemos caer quien sabe en la tentación del individualismo, de la ambición, si no tenemos en cuenta la lucha de nuestros antepasados, queridos profesores y estudiantes es importante recordar estas luchas (…)
Recordar a Juana Azurduy de Padilla y a Saavedra, hombres que dieron su vida, su tiempo por esta Patria.
El mejor homenaje es recordar a nuestros antepasados que nos dejaron primero valores y segundo principios. Cuando digo los valores digo el movimiento indígena que ya durante la Colonia, antes de la República, dio su batalla, no es casual que tenemos Tomas Catari, Tupac Catari y Tupac Amaru, tantas luchas antes de la fundación de la República, tantas movilizaciones, la marcha o la caminata de los hermanos Catari desde el norte de Potosí hasta Buenos Aires, para hacerse reconocer primero como autoridades originarias, segundo para defender nuestra identidad y tercero para defender los recursos naturales. Fueron tres mil kilómetros de caminata, los indígenas estaban prohibidos a usar caballos en esos tiempos, y ahora hay compañeros dirigentes que ni siquiera quieren movilizarse en aviones.
Los valores los pusimos en la Constitución Política del Estado Plurinacional: Ama Sua, Ama Quella, Ama Llulla (no seas ladrón, no seas mentiroso, no seas ocioso).
Si hubiéramos aplicado estos valores desde la fundación de la República, hoy Bolivia estaría cooperando con el mundo y no esperando cooperación (…).
El colonialismo interno es el mejor instrumento de dominación del imperialismo. Tenemos que ampliar el mercado interno para no depender del mercado norteamericano, o del mercado europeo o del mercado chino, es importante exportar pero esos mercados no pueden definir nuestra política económica, depender del mercado norteamericano, europeo o chino, en el futuro podemos tener problemas serios en nuestra economía.
La Unasur y el Mercosur pueden ser complementarios de nuestra economía (…) tiene que haber relaciones de reciprocidad.(…) En Estados Unidos de Norteamérica ninguno, sea republicano o demócrata, no van a cambiar sus políticas porque dependen de los banqueros y los fabricantes de armas (…). Nuestros estudiantes tienen que especializarse en temas científicos, mandamos 72 de nuestros mejores estudiantes a China para tener satélites de comunicación y 24 a Corea por el tema del petróleo, otros irán a especializarse en electricidad”.
Evo finalizó diciendo “si no hubiese habido estas batallas, si no hubiese habido guerrilleros de la independencia, hubiese continuado el saqueo y no hubiera habido República. Nuestro mejor homenaje es respetar nuestros valores y principios y nuestro mejor homenaje a quienes lucharon antes y a sus familiares seguramente presentes y a quienes organizaron este lindo acto como homenaje a la Batalla de Suipacha”.
Para finalizar se realizó el desfile cívico-militar.
Desde Jujuy fueron descendientes de familias de suipacheños que combatieron en la Guerra de la Independencia y el músico Oscar Berengan que compuso el “Yaraví de Suipacha”. También estuvo presente, como todos los años, el Mayor Jorge Vizoso Posse, veterano de Guerra de Malvinas .

sábado, 17 de noviembre de 2012

¿Habrá algo de cierto en esto?


¿Será cierto?
Se dice que Héctor Timerman (el Canciller, que en 1976 apoyaba a la Dictadura desde su diario “La Tarde” y ahora se volvió progresista), desde su ministerio pidió auxilio a Brasil en Ghana y jamás hubo una respuesta activa. Las evasivas están vinculadas a un hecho que Itamaraty conoce y Timerman prefiere ocultar, un reflejo de la mala praxis argentina que fue aprovechado por el fondo buitre MNL Capital.
Existe constancia de que antes del ingreso de la Fragata Libertad al puerto, las autoridades navales de Ghana notificaron que existía el peligro de embargo. El comandante del buque escuela pidió urgentes instrucciones a Buenos Aires. Pero la respuesta llegó tarde: 48 horas después, cuando ya estaba dispuesto un embargo injusto.
Una pregunta: ¿para qué enviamos la Fragata Libertad a un puerto de la Comunidad Británica? ¿para demostrar que somos sumisos y cumplimos con los Tratados de Londres y Madrid, que firmaron Menem y Cavallo?. ¿Para demostrar que somos los niños obedientes del mundo globalizado?.

EL MALHUMOR Y LA BRONCA


EL MALHUMOR Y LA BRONCA
El gobierno fue perdiendo el control de gran parte del movimiento obrero y popular. Lo fue perdiendo por su política de descargar la inflación y la crisis sobre los trabajadores y el pueblo. En oposición a esa política, con diversos matices y posiciones y con mediaciones, se fue produciendo la unidad de acción de fuerzas obreras y populares. El gobierno quedó abrazado al colaboracionismo gratis de la CGT de Caló y la CTA de Yasky.
El gobierno K trabajó con todo para impedir la confluencia de un centro coordinador de la lucha obrera, campesina, originaria, estudiantil y popular. Fracasó en el Congreso de Federación Agraria como antes en el de la FUA.
A partir de una política justa de unidad para la lucha, se avanzó desde el paro nacional de la CTA junto a las principales organizaciones de desocupados, jubilados, campesinos pobres y medios, originarios y estudiantes. Eso creó las condiciones para que empalmara la CGT que dirige Moyano hacia el paro nacional, al que ha anunciado que se sumará la CGT Azul y Banca.
En ese proceso de unidad de acción de fuerzas obreras, campesinas, estudiantiles, originarias y populares, se volcaron nuevos afluentes con los dos cacerolazos, con la heterogeneidad que está a la vista. Todo este proceso fue lo que llevó a que el gobierno perdiera las calles.

¿Quién tiene razón?


Mentiras y verdades
La Presidente afirmó que los caceroleros “tienen una visión distorsionada del país”, Aníbal Fernández los calificó de “ultraderecha paga”, el “Cuervo” Larroque los trató de “zombis”, y el diputado Kunkel los calificó de “sediciosos” por violar el principio ultraliberal de que “el pueblo no delibera ni gobierna sino a través de sus representantes”.
¿Quién tiene una “visión distorsionada del país”? ¿los asalariados que reclaman un plus de fin de año para que el impuesto a las ganancias no les robe el medio aguinaldo, o la Presidente que mantiene ese impuesto contra los trabajadores debiendo saber que el salario no es ganancia?, ¿los jubilados que reclaman el 82% móvil, o la Presidente que vetó la ley que lo establecía para poder seguir saqueando la Anses?, ¿los habitantes de Pico (La Pampa) que tuvieron que hacer una pueblada para imponer la cárcel del asesino y violador de una niña ante la impunidad del gobierno, la justicia y la policía; o la ministra Garré que afirma que “la inseguridad” es “una sensación”?
¿Quién ve la realidad?: ¿los marinos de la fragata Libertad que defendieron con sus armas el intento de ocupación del barco, o la Presidente y su ridículo canciller que no hacen nada serio para traerla de vuelta a la Argentina?
¿Quién tiene los pies puestos sobre la tierra?: ¿los que reclaman que se investigue la deuda externa y no se pague la que es ilegítima, fraudulenta o de la dictadura; o la Presidente que se jacta de que este gobierno es el mejor pagador de deuda de la historia, que se dispone a pagar 3.385 millones de dólares en diciembre, mientras la justicia y los fondos buitres imperialistas nos embargan la fragata Libertad, y en cualquier momento la corbeta Espora?
¿Quién miente?: ¿los trabajadores ocupados, desocupados y jubilados y los productores de la ciudad y el campo, que protestan para que la inflación no les devore sus ingresos, y la crisis no los lleve al hambre y la quiebra, o el gobierno que niega la inflación y la crisis?
¿Quién lucha por la justicia?: ¿los 5.000 procesados por pelear por sus derechos, con huelgas, piquetes, y también con cacerolas; o el gobierno que los procesa, que mantiene como vicepresidente a un estafador, que mantiene como altos funcionarios a los responsables de la masacre de Once, de la crisis energética, y que anuncia que va a cerrar las causas del genocidio dictatorial cuando más del 80% de esos crímenes siguen impunes y no tienen cabida en los juicios actuales?.
La Presidente excluyó el medio aguinaldo del cálculo de Ganancias. ¿Es un gran beneficio o la realidad es que no lo es?. La realidad es que un trabajador soltero que gana $ 7.000 por mes, este año le retendrán por este impuesto $ 1.226, en lugar de $ 1.716. Son $ 490 menos. Pero si el Gobierno hubiera aumentado el mínimo no imponible y las escalas salariales según la suba de la inflación, ese mismo trabajador no pagaría nada. En cambio, sigue alcanzado con $ 1.226 anuales.

lunes, 12 de noviembre de 2012

Un paralelo entre dos reaccionarios: Javier de Elío y Carlos Kunkel


Un paralelo entre dos reaccionarios: Javier de Elío y Carlos Kunkel

de Eduardo Mariano Lualdi, 11 de noviembre de 2012

"Por la vía de la criminalización de la protesta, emprendió el diputado Carlos Kunkel, al conjeturar que los protagonistas del 8N habrían incurrido en el delito de sedición. Sorprendido, su entrevistador quiso saber en qué basaba tamaña afirmación. Y Kunkel contestó: “No lo digo yo. Lo dice la Constitución. El pueblo no delibera ni gobierna sino por medio de sus representantes”.(Susana Viau, Clarín, 10 de noviembre de 2012).
Kunkel va a la esencia de los fenómenos que se vienen sucediendo en la sociedad argentina en las últimas semanas y que llevan la impronta de los días convulsionados de diciembre de 2001. Se refiere a las prácticas que aproximan a la democracia directa, la democracia grande donde el pueblo muta en protagonista decisorio de su propia historia. La movilización popular y la movilización popular elevada a la pueblada, es un modo político propio del pueblo argentino para imponer un rumbo diferente a la historia. Es por esa vía que el pueblo supo imponer su propio derrotero y constituyó la esencia del proceso que coaguló el 25 de mayo de 1810. Y fue por esa vía también que dio nacimiento al proceso del Gral. Perón el 17 de octubre de 1945, y que tan afanosamente procura destruir el kirchnerato.
En prácticas que aproximan a formas de democracia directa se inscribe el cacerolazo del 13 de septiembre, las formas asamblearias de la rebelión de Gendarmes y Prefectos y el 8 de noviembre con el nuevo cacerolazo. El pueblo demuestra que  delibera al margen de “sus representantes”.Justamente esta era una de las cuestiones de la “gran política” que los Kirchner se comprometieron a resolver cuando Duhalde los catapultó a la presidencia con la bendición de Héctor Magnetto y el grupo Clarín en mayo de 2003. En aquellos conciliábulos de las minorías gobernantes, los Kirchner se comprometieron, además, a reconstruir el Estado resquebrajado como producto de la rebelión popular de fines del 2001 y a pagar la deuda externa argentina, de allí su “progresista” política de “desendeudamiento” que el juez Griesa de Nueva York se está ocupando de hacer jirones con sus fallos.
Kunkel como buen reaccionario, tiene espanto profundo de este fenómeno que encuentra sus raíces en el nacimiento de la Patria. Así fue en 1806 y 1807: el pueblo, abandonado por sus dirigentes políticos y traicionado por sus jefes militares que fueron en masa a jurar fidelidad a Su Majestad la Reina de Inglaterra, se autoconvocó –se diría en la actualidad- y se constituyó en Ejército ciudadano. Dijo Matheu: “Los oficiales dispersos de los Ejércitos de tierra y los oficiales dispersos de los Ejércitos de Mar, se unieron al pueblo y constituyeron un ejercito ciudadano”; dos insurrecciones derrotaron en 1806 y en 1807 a la primera potencia mundial de entonces: Inglaterra.
Como producto del protagonismo insurreccional del pueblo, nacieron los ejércitos patrios que se lanzarían a la epopeya continental de la emancipación americana, y aquella revolución imaginada por Belgrano para la segunda década del siglo XIX, se precipitó, también por factores externos, para los primeros meses de 1810, cuando las noticias de Europa terminaron de fermentar el largo trabajo del Partido de la Independencia, fundado por Castelli en 1802.
Los Regimientos de Arribeños, Blandengues, Pardos y Morenos y especialmente los Patricios, se conformaron con soldados bisoños llenos de entusiasmo, que eligieron a sus oficiales por voto directo y estos a sus mandos superiores; tanto Saavedra como Belgrano así fueron elegidos; y cuando el fugado virrey Sobremonte quiso retomar el gobierno, una verdadera asamblea popular ciudadana se autoconvocó en la Plaza de la Victoria, y impuso a Liniers como nuevo gobernante. Javier de Elío entonces desde la Banda Oriental, una especie de Kunkel del siglo XIX, habrá argumentado como Kunkel: “No señores, el pueblo no delibera ni gobierno sino a través de Su Majestad el rey de España”. Pero el proceso libertario era a esa altura indetenible y pueblo, milicias y Ejército patrio, se impusieron entre el 21 y el 25 de Mayo derrocando al Virrey Cisneros, y alumbrado con un nuevo sol la historia suramericana, ahogada en sangre no hacía más que un año, en la abortada revolución del 25 de mayo de 1809 en Chuquisaca.

domingo, 11 de noviembre de 2012

10 puntos sobre el 8N


10 PUNTOS SOBRE EL 8N
Horacio Micucci

1.- Todas las fuerzas políticas y sociales se expresan favor o en contra  del cacerolazo del jueves 8, convocado por las redes sociales de Internet. De qué conclusiones se saquen de esta movilización (así como de anteriores como la del 13 de setiembre) y de los reclamos obreros (como los paros anteriores y el próximo de fines de noviembre) dependen en gran medida los caminos que se elijan para que Argentina  encare o no la ruta de su Independencia Nacional.
2.- El cacerolazo del 8N fue una multitudinaria y heterogénea movilización de protesta y reclamos al gobierno. Fue mayoritaria la presencia de jubilados reclamando el 82% móvil ya, de jóvenes y de mujeres. El reclamo unánime fue más visible contra la inseguridad, la inflación, la corrupción y la re-re elección. También el reclamo de una justicia independiente.
3.- Los reclamos fueron contra el gobierno pero la oposición tradicional no capitaliza el descontento a pesar de que lo intentó. Reclamos como los cacerolazos muestran, también, disconformidad con las opciones tradicionales y necesidad de otras salidas, con autoconvocatoria, parte de un fenómeno que se ve en otros lugares del mundo y que ya se manifestó en Argentina en ocasión del Argentinazo con expresiones de democracia directa. La oposición tradicional, que busca variantes al sistema de dependencia, sumisión e indefensión nacional (para mantenerlo) no logra encontrar una forma de encorsetar y canalizar en su beneficio el descontento. Macri lo intentó, no respetando el formato de la autoconvocatoria que expresaron los organizadores principales del 8N. No lo logró y, a la vez, (¿cómo otras veces, demasiado frecuentes?) fue funcional al gobierno que buscó minimizar y atribuir la protesta a sectores tradicionales. A la vez, el gobierno, introdujo elementos provocadores de sus servicios de inteligencia con el objetivo de desprestigiar la protesta. Fue correcto respetar el formato de autoconvocatoria elegido.
4.- Distintos sectores populares vuelven a los métodos y caminos que aprendieron en el 2001 y antes. Argentina es un país de puebladas. En el último tiempo hubo luchas de los trabajadores de distintas áreas. También las capas medias están afectadas. Ellas también son parte del pueblo.
5.- Ante lo anterior, la preocupación por la gobernabilidad de Argentina, para que permanezca de rodillas, se expresa en las bocas más conspicuas de la oposición tradicional. Dice Mariano Grondona:
“Es como si ya contáramos con los ingredientes básicos para construir el sistema de alternancias que es la democracia. Pero los tenemos y no los tenemos porque a los que ya tenemos y no teníamos hasta hace pocos días, el "muro" al re-reeleccionismo en el Congreso y la inmensa manifestación del 8-N, deben sumarse todavía otros dos ingredientes que aún no tenemos: la organización de la oposición en una efectiva fuerza política capaz de ganar elecciones o por lo menos de competir en ellas y, finalmente, la resignación "no presidencial" de la propia Cristina.” La Nación, 11 de noviembre de 2012.
Otro artículo, del diario La Nación, del mismo día, dice:
“Si la actual crisis se profundiza, podría debilitarse aún más el liderazgo presidencial. Si ése fuera el caso, habría un franco peligro de inestabilidad: en el período 2003-2011, el fortalecimiento de la autoridad presidencial ha disimulado (y a la vez profundizó) el disfuncionamiento estructural del marco institucional de la Argentina. Un eventual vacío del poder presidencial, generado por la acumulación de errores no forzados, en combinación con una visión épica y transformacional en el devenir político nacional que la familia Kirchner se asignó a sí misma, podría disparar una nueva y lamentable crisis de gobernabilidad.(…) La primera pregunta remite a la crisis de representatividad que afecta a la política argentina desde hace tiempo, pero que se profundizó con la crisis de 2001. (…) No hay quién ordene y priorice las múltiples demandas insatisfechas que el Gobierno prefiere ignorar. Esto alimenta un problema de legitimidad de ejercicio: el 54% de los votos le otorgan a la Presidenta una legitimidad de origen incontrastable, pero a diario debe rendir examen ante una sociedad que exige respuestas concretas a los problemas que se acumulan.” El peligro latente de comprometer la gobernabilidad. Sergio Berensztein. La Nación. 11 de noviembre de 2012.

Es grande la preocupación (tanto en el gobierno como en la oposición tradicional) de que el descontento exceda los márgenes de gobernabilidad y la búsqueda de un corsé para perpetuar el proyecto de sumisión nacional que éste y otros gobiernos gerentes de la dependencia han expresado hasta ahora.
El diputado oficialista Kunkel lo expresó crudamente al acusar de sedición a los participantes del 8N, aduciendo que “No lo digo yo. Lo dice la Constitución. El pueblo no delibera ni gobierna sino por medio de sus representantes”. Clarín. 11 de noviembre de 2012. 
6.- En el fondo, las grandes preguntas que enmarcan a esta protesta y los reclamos sindicales son: a) ¿quién va a pagar los platos rotos de la crisis mundial y nacional? b) ¿con qué formas orgánicas se hará esto? c) ¿lograrán restituir un sistema bipartidario de gerentes de la dependencia con un ala expresada por el kirchnerismo (o similares) y otra expresada por el macrismo (o variantes análogas) o la protesta romperá el corsé de la dependencia y la sumisión nacional?.
7.- La inflación castiga los bolsillos populares. Las consecuencias de una política de entrega y sumisión nacional irritan, la crisis golpea también a Argentina, aunque el gobierno la niegue. Argentina es frágil en esta crisis económica porque los distintos gobiernos gerentes de la dependencia (incluido éste) han profundizado la sumisión e indefensión nacional.
Digan lo que digan los “relatos” de los gobiernos, Argentina es un país dependiente, desgarrado por la rapiña de distintas potencias imperialistas y con una parte de su territorio colonizado por los ingleses.
8.- Los sectores populares buscan ir por más, y no aceptan seguir pagando el ajuste, la inflación y la crisis consecuencias de la sumisión nacional a que nos han llevado. Las aguas bajan turbias, porque la correntada arrastra de todo. Pero los patriotas y luchadores populares no le deben tener miedo a las movilizaciones ni a la correntada. Hay que atreverse a nadar en la corriente. La multitudinaria manifestación nacional del 8N, refuerza la necesidad y las posibilidades exitosas del Paro Nacional que preparan, para fines de noviembre, organizaciones gremiales de distinto signo, obreras, campesinas, estudiantiles, docentes y de otros sectores populares
9.- Se presentan óptimas condiciones para una unidad que exprese lo patriótico y nacional unido a lo democrático y popular. Es preciso, para ello, que las protestas como las del 13 de setiembre y el 8 de noviembre marchen unidas a luchas sindicales como el paro programado para fines de noviembre. Los piquetes unidos a las cacerolas.
10.- Todo lo anterior puede abonar el surgimiento de una nueva huella argentina, con un programa unificador de Independencia Nacional, cumplimiento de los derechos del Pueblo con verdadera Soberanía Popular y Democracia Grande y recuperación del Patrimonio Nacional, que posibilite un Primer Gobierno Patrio que inicie el camino de la Segunda y definitiva Independencia.
Horacio Micucci
11-11-2012

lunes, 22 de octubre de 2012

DOS DOCUMENTOS HISTÓRICOS: militares legalistas



NI TODOS LOS CIVILES SON AMIGOS NI TODOS LOS MILITARES SON ENEMIGOS.
RESISTENCIAS A LOS GOLPES MILITARES
DOS DOCUMENTOS HISTÓRICOS
Se ha hundido en el olvido que hubo resistencia al golpe de estado de setiembre de 1930, en el seno de la Fuerzas Armadas, ocultando (para que no cundiera su ejemplo en el futuro) la acción de los grupos legalistas que, dicho sea de paso, también existieron después del Golpe de 1955 y que se expresaron en el Movimiento de junio de 1956, donde el Teniente Coronel Adolfo Philippeaux tuvo una activa y destacada participación.
En efecto, la resistencia al golpe del 30 tuvo importante eco en los cuarteles, expresándose en levantamientos militares como el de los suboficiales en Córdoba (orientados por Amadeo Sabattini) el 27 de diciembre de 1930, el dirigido por el General Severo Toranzo el 20 de febrero de 1931 en Buenos Aires y el encabezado por el Teniente Coronel Gregorio Pomar el 20 de junio de ese mismo año, en Corrientes.
Ya bajo el gobierno del General Justo, el 28 de junio de 1932, era asesinado en Curuzú Cuatiá, Corrientes, el Mayor Regino Lascano, quien era parte del movimiento cívico militar comandado por el Teniente Coronel Atilio Cattaneo, finalmente desbaratado en diciembre de ese año. Más tarde se produciría el levantamiento del 28 de diciembre de 1933 dirigido por el Teniente Coronel Roberto Bosch en Paso de los Libres (Corrientes), con ramificaciones en Santa Fe y Buenos Aires, del que participaron Arturo Jauretche y Luis Dellepiane, luego fundadores de FORJA.
Nos parece conveniente transcribir dos documentos históricos. El primero es una carta dirigida por el General Severo Toranzo, desde el exilio, al General José Félix Uriburu. El segundo documento es el último discurso del Teniente Coronel Adolfo Phillippeaux, en conmemoración del Día de la Reconquista, en el año 2004. Recordamos al lector que el Teniente Coronel Philippeaux fue uno de los militares legalistas que se sublevó y armó al pueblo de La Pampa, en el Movimiento legalista de junio de 1956, que dirigía el General Valle, fusilado por los golpistas del 55.
PRIMER DOCUMENTO
General Severo Toranzo: "Al General Uriburu" (20 de febrero de 1932)
Carta del General Severo Toranzo al General Uriburu, Montevideo 20 de febrero de 1932.
Al general retirado José F. Uriburu, Buenos Aires.

Le dirijo estas líneas asumiendo también y por derecho de antigüedad la representación de los militares de toda jerarquía a quienes usted y sus esbirros han ofendido infamemente, apoya­dos en la fuerza brutal que ha tenido en sus manos, para deshonra de la civilización desde el día del malón del 6 de septiembre hasta la fecha.
Solamente en un alma vil y cobarde podían anidar los sal­vajes instintos que usted ha revelado, ensañándose con sus propios camaradas del ejército al punto de hacerlos azotar y torturar, de uniforme, por verdugos civiles y policíacos que han emulado a los más sombríos y repugnantes personajes de la historia.
Cuando pienso que una hiena como usted se ha disfrazado durante 47 años con el uniforme de los defensores de la Consti­tución, prometiendo, engañando, adulando, mintiendo y corrompiendo conciencias de oficiales de todos los grados, no encuentro monstruo con quien compararlo en los anales de nuestra vida democrática.
Esa es su obra, que tendrán que recordar con horror las futuras generaciones argentinas. Ha habido un Caín capaz de atentar contra la vida, contra el honor y contra la dignidad de sus compañeros de armas, dividiendo la familia militar en dos bandos irreconciliables y sembrando odios tan profundos que quién sabe cómo y cuándo podrán ser amortiguados.
Hasta el 6 de septiembre de 1930 teníamos un ejército que era el ídolo de los argentinos. Nadie, entre los peores gobernantes, había osado emplearlo como instrumento de opresión en contra del pueblo. El ejército se dedicaba tranquilamente a prepararse para la defensa de la soberanía nacional. Vd. y sus secuaces aten­taron contra su disciplina, corrompiéndolo con dádivas y prebendas y utilizándolo para la consecución de sus inconfesables fines. Hoy el ejército argentino es execrado por el verdadero pueblo.
Las persecuciones de que Vd. y sus cómplices hicieron vícti­mas a todos aquellos jefes y oficiales sospechados del crimen de no pensar como Vd., forman por sí solas un vergonzoso capítulo de los cargos que algún día —así lo espero— podrán formularse ante las autoridades de un régimen de libertad. Las historiaré brevemente, en lo que me concierne de un modo personal.
El día 9 de septiembre de 1930 ordenaba Vd. la prisión e incomunicación absoluta, en el arsenal Esteban de Luca, del sus­cripto, de los generales Baldrich y Mosconi y de más de cincuenta jefes de menor jerarquía, cuyo único delito consistía en no ha­berse presentado ante Vd. o su pseudo-ministro de guerra para hacer acto de pleitesía ante el cacicazgo que se entronizaba.
Dos días se nos mantuvo en esta humillante situación. ¿Qué nos restaba por hacer, a los que no habíamos perdido la dignidad de argentinos participando en el motín, sino retirarnos inmedia­tamente de las filas de un ejército que ya no tenía leyes? Así procedí, junto con otros, para salvar mi honor de soldado y no tener que prestar acatamiento a un gobierno de asaltantes, que llegaba al poder público con la vincha de Calfucurá.
Desde que se nos puso en libertad entró en acción su siniestra policía, para no abandonarnos ni siquiera más allá de los confines patrios. El miedo del "presidente provisional" y de sus ministros, comenzando por Sánchez Sorondo, de ingrata recordación, veía conspiraciones y "complots" en toda reunión, en toda conversación y en las más inocentes manifestaciones de la vida diaria.
Había que encontrar pretextos para deshacerse de todos aque­llos ciudadanos de algún valer que anhelaban la libertad de la patria y de quienes se sabía que estaban dispuestos a sacrificarle sus vidas en cualquier momento.
Dirigida por encausados de la justicia, la policía de investi­gaciones intentó calmar el miedo permanente en que Vd. vivía, "descubriendo" un movimiento revolucionario encabezado por mí. Con tal propósito en vista, y afirmando capciosamente que se pensaba aprovechar los días de Carnaval de 1931 para el estallido, fueron encarcelados numerosos oficiales y civiles y se trató de capturarme, a mí, sobre quien pesaba una orden de prisión y de muerte dada por Vd.
Fracasó el intento en lo que a mí se refería, pero se encontró justificado detener a mi hijo, el teniente Toranzo Montero, que se encontraba sirviendo en un regimiento a más de mil kilómetros de la Capital. Las torturas morales y físicas que le aplicó su  gobierno por intermedio de los criminales Alberto Viñas, Bautista, Molina, comisario Galatto y otros "valientes" de la misma calaña  son dignas de figurar únicamente en el proceso de un Torquemada. Estos sujetos llegaron hasta comunicarle mi fusilamiento y ame­nazarle con la reclusión de su madre y hermanas en el buen Pastor.
Usted hizo publicar en el pasquín "Ultima Hora", con mi retrato, la calumniosa especie de que yo había jurado fidelidad a su gobierno. A usted le constaba que tal cosa era mentira. Pero de un cobarde como usted sólo es dable esperar calumnias y difamaciones.
Si en mi país hubiesen existido leyes, me hubiera presentado tranquilamente, ante mis jueces naturales, para sincerarme, en la seguridad de que no había cometido delito alguno.
Era ya entonces un general retirado, por propia voluntad, y en ningún momento me acerqué a un establecimiento militar. Es cierto que mantenía y mantengo estrecha relación con la mayoría de las víctimas de su miedo, pero es falso que yo intentase pro­ducir una "alteración de orden público", como despectivamente usted y su policía inventaron. Muy diferente era mi actividad: aspiraba tan sólo a defender la patria contra la horda de delin­cuentes que la esclavizaba después de haber abolido la Constitu­ción. Tratabase de orientar indispensables acciones libertarias, de sedimentar conciencias democráticas y engendrar sagradas rebel­días, cosas todas éstas que su torpe mentalidad no alcanzará a comprender, pero que debían servir —y servirán tarde o tem­prano— para consolidar la conciencia de libertad que deben tener todos y cada uno de los argentinos, amantes de su patria.
Por este crimen —por el crimen de aspirar a que el país se repusiese del malón de septiembre, reintegrándose al imperio de sus instituciones— usted me emplazó como a un delincuente y me hizo destituir por intermedio de sus amanuenses Medina y Sánchez Sorondo.
Poco valor atribuyo a tal desmán. He sido consagrado tres veces oficial superior por un Senado de legítimo origen constitucional. Soy, pues, general de la Constitución y ningún innoble mandón como usted puede arrebatarme la alta jerarquía militar que invisto, como premio a cuarenta años de ininterrumpidos y leales servicios, orientados siempre a la consolidación de la disci­plina, al perfeccionamiento de la instrucción y a la generación de los más nobles sentimientos patrióticos en los militares de todos los grados. Las tropas que tuve el honor de comandar fueron siempre baluarte de disciplina en el ejército. Baluarte indispen­sable para contrarrestar la obra disolvente en que usted siempre estuvo empeñado con su secta; con esa secta de traidores a la patria que le ha acompañado en el gobierno.
La carrera militar de usted —navegante en todas las armas desde su egreso del Colegio Militar: infantería, artillería, inge­nieros y caballería— constituye el más acabado ejemplo del favoritismo, sin cuyo concurso no habría usted llegado nunca ni a capitán. Pero, sobrino de un presidente, y beneficiario por matri­monio de las ganancias del puerto Madero, le fue fácil conseguir, mediante halagos y convites sociales, lo que nunca hubiera podido obtener por sus virtudes y capacidades profesionales.
Posteriormente, cuando perdió la fortuna del matrimonio, usted se dedicó a la usura y a la coima. Ejemplos típicos de la suciedad de sus "negocios", que me exime de detallarlos, es su íntima vinculación con el Banco de Finanzas y Mandatos y su participación en el peculado de la yerba mate.
Llegó el 6 de septiembre, día de luto para la democracia argentina. Al amparo de un régimen de fuerza al que la historia aplica desde ya los más infamantes calificativos, usted y sus aprovechados colaboradores dedicáronse a saquear la Caja de Conversión, nuestro sagrado tesoro, exponente de la riqueza na­cional y de un gran poderío económico; ya casi no existe. Y hoy en día no tenemos dinero ni para pagar a la administración pública. ¿Cómo hemos de tenerlo, después de haber usted derro­chado millones y millones en mantener parasitarias "legiones” cívicas verdaderos ejércitos de voraces espías de ambos sexos? Ahí está el fruto más visible de la "revolución" y de su trágico desgobierno.
Vd. y su pandilla, de reaccionarios sin moral ni conciencia, hicieron recaer todo el peso de sus odios brutales sobre el pueblo libre y trabajador, cuyo martirologio en la persona de sus jefes y dirigentes más destacados, no tiene paralelo en la historia de nuestras luchas sociales. Al acentuar hasta el paroxismo, con esa inhumana política, la división de los argentinos en explotados y explotadores, en siervos y señores, Vd. y sus esbirros se han hecho responsables de las desgracias en que sumirán al país los violentos conflictos que han venido incubándose y que fatalmente estallarán cuando las garras del despotismo dejen de apretar la garganta del pueblo, o antes si la opresión continúa.
Tampoco respetó Vd. a los obreros de la inteligencia, a esa brillante juventud universitaria, cuyo crimen consiste en querer una patria remozada, adicta, a los postulados de la justicia social. Más de uno pagó con su vida, en pleno centro de Buenos Aires, la, osadía de protestar públicamente contra el oprobio que por culpa de Vd. y de sus secuaces motineros padece la República.
La desocupación, la miseria y el hambre se ciernen hoy sobre el pueblo argentino. Ningún gobierno del pasado, por objetable y nefasto que con justicia haya podido considerársele, arrastró jamás al país a un caos económico semejante al que hoy lo destroza.
Simulando patriotismo, Vd. es, en realidad, un agente venal de turbios intereses extranjeros. Los recargos de impuestos al pueblo por simples decretos —úkases— como el vergonzoso de la nafta, pomposamente fundado en la necesidad de construir cami­nos, pero en realidad obedeciendo a presiones de la Standard Oil —a la cual, por otra parte, se le han revalidado todas las prebendas acordadas por los gobiernos de Salta, anteriores y posteriores al del Dr. Adolfo Güemes, y en el orden nacional en la zona de Comodoro Rivadavia y Plaza Huincul— constituyen un índice significativo de la influencia de que han gozado, en el "gobierno provisional" y sus pretorias de provincias, las grandes empresas extranjeras.
Nuevamente, pues, y ahora por obra de usted y con caracteres de inusitada gravedad, queda amenazada la integridad soberana de la república en su patrimonio económico. Este es otro de sus grandes títulos para la posteridad.
El crudo nepotismo que hoy domina en la nación y en las provincias, en cuyos gobiernos ha entronizado usted la propia parentela y la de sus cómplices hasta el décimo grado, constituye otro ejemplo del "altruismo" de sus procederes, así como de la magnitud de los "sacrificios" que usted y su secta han "realizado" en aras de la patria, como lo expresara usted tan repetidas veces en su ampulosa cínica oratoria.
Culmina toda esta infamia con los nombramientos para re­presentar al país en el extranjero, recaídos en Viñas, Bautista, Molina, Lugones y otros, como premio al servilismo con que se prestaron a oficiar de verdugos, aplicando por orden directa de usted, medioevales torturas a los argentinos que no se avinieron a transar con la tiranía.
Con sus dádivas y favores, finalmente usted ha prostituido la conciencia de miles de argentinos, principalmente militares, y ha introducido en el ambiente moral del país un fermento de degeneración que costará mucho esfuerzo extirpar. Sólo así se explica que al usurero Uriburu, se le obsequie una casa mientras el gran Sarmiento murió pobre, en una humilde choza. Los tiem­pos, ciertamente, han cambiado.
Deliberadamente he retardado, hasta hoy el envío de esta carta. Antes se hubiera cubierto usted con su posición usurpada.
No necesito extenderme más. Con lo dicho basta para demostrarle sus delictuosas y cobardes hazañas.
General Severo Toranzo
20 de febrero de 1932
Fuente: Extraído del libro "El Plan de 1932" del Teniente Coronel Atilio Cattaneo.

SEGUNDO DOCUMENTO
Discurso pronunciado por el Tte. Cnel. (R) Don Adolfo C. Philippeaux el 12 de agosto de 2004, con motivo del 198º aniversario de la Reconquista de Buenos Aires
Queridos amigos, compatriotas, ¡compañeros!:
Yo soy peronista, así que no puedo empezar de otra manera.
Quiero decirles, ya que dije compañeros, que en esta lucha actual que llevamos contra la hipocresía de quienes nos mandancontra la entrega del patrimonio nacional, coincidimos hombres de centro como yo y algunos de izquierda que militan fuertemente. Algunos se quejan, dicen: “Che, Philippeaux, vos sos militar”. Sí, ¿y?... Mi padre también era militar ¿y qué tiene que ver?... Pero yo ando con la izquierda porque también son argentinos, porque también están gritando por la entrega del poder y la obsecuencia a los imperialismos, y por otra parte, yo me junto con quien quiero. ¿Estamos claros compañeros?
Porque cuando estábamos presos (yo estuve condenado a muerte y me la banqué), cuando nos tiraban tantos tiros como me han tirado a mi, no aparecían esos “consejeros”.
Ahí estamos en la lucha por la supervivencia. Y yo he tirado muchos tiros. ¡También!... fui campeón de arma de guerra. Porque yo fui deportista, con otros muchachos... Recuerdo en el año ’51 salimos: Argentina en primer lugar, EE.UU. en segundo. En las olimpíadas en el año ’55 fue al revés, primero EE.UU., segunda Argentina, pegaditos ahí... Yo hacía esto porque me lo ordenaba el General. Me dijo: “Philippeaux usted va, compite, gana, no se me pone de novio por ahí, y vuelve. ¿Entendido?” Y yo cumplí el pedido del General.
Pero: ¿y ahora? ¿Qué pasa con el deporte? ¿Qué dicen los gobernantes de turno? ¡Si en la última olimpíada salimos detrás de Nicaragua! ¡Octavo salimos! ¡Un desastre! Las que andan bien son esas “Las Leonas”  que juegan al hockey y nada más, el deporte anda para el carajo como todo el país.
Yo me expreso con toda libertad porque a ustedes los quiero mucho: ustedes son los argentinos que pueden salvar al país y por eso les hablo con franqueza. ¡No van a querer venir a asustarme ahora! ¡Que me vienen con eso de que voy a ir en cana! Primero que con la edad que tengo, estoy cerca de los ochenta, no van a hacer una ley especial para mi, me van a tener que dejar en mi casa, como hacen con todos esos ladrones y corruptos que no tienen ni un día de prisión.
Muchas veces yo veo a dirigentes de mi propio partido: ¿cuando estuvieron en cana?
Algunos, por ahí, en algún barco...bien atendidos... pero ¿en qué prisión estuvieron? ¡No!, en ninguna. Vamos a hablar con la verdad...
Bueno...pero vamos a hablar del tema que nos convoca: este día de la Reconquista. Quiero rendir mi homenaje a esos hombres del pueblo argentino que se juntaron y armaron para defender a esta parte de Sudamérica de las invasiones inglesas.
Fíjense que ejemplo que nos dieron: se unieron, se armaron, porque estaban dentro del territorio, porque si hubiese sido como en la guerra de las Malvinas, donde fuimos a hacer la guerra en un punto “x” del océano, lejos del sentimiento popular y de su apoyo, no como se dio en la segunda invasión inglesa en la que nuestras mujeres, nuestras madres, con agua hirviendo le tiraban a los ingleses...
Yo, por ejemplo, quería ir a pelear a las Malvinas, pero no se podía; iban nada más que los “milicos” que mandaba el gobierno, pero si hubiese sido en el territorio nacional, hubiésemos podido luchar muchos argentinos y los hubiésemos quemado vivos a los ingleses.
Esta fue una guerra injusta de todo punto de vista, pero sirvió para unir a los argentinos, para poder darnos cuenta que tenemos que estar juntos y defendiendo lo que nos pertenece.
Fíjense que esa unión es tan grande, que quienes no tuvimos la suerte de combatir en Malvinas, no tuvimos esa suerte, no la tuve justo cuando todavía era campeón de tiro y ¡cuánto ingleses hubiera matado!... pero no me dejaron...
Tenemos que unirnos y estar preparados. Porque yo observo algo muy grande dentro de todo lo que es América.
Resulta que estamos mandando tropas a Haití, pero ¡por favor! ¡Pobre Haití!, ¡todavía le mandamos tropas a Haití! Lo que tenemos que hacer los americanos es unirnos. Y cuando uno habla de, por ejemplo, Malvinas, cuando llegue el momento justo, estar todos juntos ahí. También hay que recordar quienes apoyaron y quienes no. Recuerdo que Perú ofreció tropas, se comportaron como verdaderos hermanos. Pero hubo otros, como un tal Pinochet (¡todavía vive este tipo! ¡No se muere nunca!), resultó ser un alcahuete de la Thatcher, ¡qué barbaridad!
¡Cuándo San Martín cruzó los Andes para lucha por la libertad de Chile! ¡Cuándo los argentinos marchamos hasta Perú! Y este desgraciado pasando datos de los argentinos, haciendo de alcahuete ¡nunca se lo vamos a perdonar a ese desgraciado! Y tengamos muy en cuenta porque esa fue una gran traición a todos los americanos.
Fuimos traicionados por quien era presidente de Chile, claro, era un dictador, pobre pueblo chileno; un alcahuete de la Thatcher, carne y uña con esa asesina y esos asesinos de los ingleses.
Veamos también este tema que nos interesa. El petróleo que tienen Venezuela o Irak. Si Irak no tuviera petróleo nadie sabría ni donde queda, lo que ocurre es que los imperialistas son insaciables, siempre quieren más, y van a los países subdesarrollados donde pueden sacar petróleo.
Y a la Argentina van a venir: ya compraron media Patagonia, tenemos muchos recursos que ellos quieren. Pero deberíamos estar unidos todos los americanos, entonces, cuando aparezca cualquier potencia, sea Inglaterra, EE.UU., cualquiera porque son todos imperialistas, unidos todos darles la paliza que se merecen dentro de América.
Yo pienso en el Gral. San Martín, ¡y por dónde no anduvo el General con sus tropas luchando por la libertad. Y resulta que ahora nosotros mandamos tropas a Haití porque le convienen a EE.UU. ¡Qué tenemos que hacer nosotros ahí! ¡Pobre Haití! ¿No tiene bastantes desgracias con los malos gobiernos que sufren como para que encima le mandemos nuestras tropas? ¿A quién van a cuidar? ¿O quieren impedir que alguien se subleve, tome las armas y enfrente al imperialismo? Estamos pasando esta vergüenza de mandar tropas a ese pequeño país de Centroamérica.
¿O será para meterle una puñalada a Fidel Castro? Porque yo no comparto su ideología pro-comunista, pero hay que reconocer que es un coloso... es un tipo que se puso de soldado, hizo un curso con un coronel español durante tres años que lo tenía rajando, y se hizo soldado y miren la paliza que le dio ese hombrecito que todavía esta ahí frente a EE.UU.
Acá no es cuestión de izquierdas o derechas, hay que ver en donde estamos parados lo argentinos. Yo les vuelvo a repetir: el enemigo de mi enemigo es mi amigo.
Así que por ahí hay algunos muchachos que les molesta que yo ande con la izquierda, por ahí algún camarada se molesta (sobre todo los de arriba), pero yo voy a donde quiero. No voy a andar preguntando que cartel tenés, si tenés una bandera roja ¡a mi eso me importa un carajo! Yo voy donde quiero y voy por la libertad y por la soberanía de mi patria.
Vine a Buenos Aires por un homenaje a ese patriota formidable que fue Alejandro Olmos.
Este tema de la deuda externa, el Fondo nos presiona, pero peor son los argentinos que se prestan —por una “cometa”, porque no lo hacen de “buena voluntad”— a facilitar los pagos de la deuda externa.
Cuando se fue el peronismo, que fui de nuevo en cana porque yo era Secretario de Deporte y Turismo, la deuda externa cuando se fue Isabelita —con todas las fallas que haya tenido pobrecita—, era de cinco y pico de miles de millones de dólares. ¡Y vean como estamos ahora! ¿Nadie es responsable? ¿Todos se lavan las manos? ¿Nadie va en cana? ¿O van a venir a venir a meternos en cana a nosotros porque somos peronistas, o estamos en la calle pidiendo trabajo, o exigiendo que no sigan robando los políticos de siempre?
Esto no tienen gollete: la deuda externa no hay que pagarla, y que pase lo que tenga que pasar.
Otro patrimonio nacional, y comparto acá las opiniones del amigo Maturana de Mar del Plata (yo estoy viviendo en Mar del Plata), es el de la pesca. Fui dos veces secretario de Pesca. La primera vez me pidieron que me hiciera cargo para poner orden. Vienen un día unos políticos, me dicen que hay que firmar urgente un acuerdo con Bolivia sobre pesca. Yo pregunté porqué tan rápido, que me dieran tiempo para consultar a los científicos. Dijeron que no había tiempo, que había que hacer la reunión. Buenos, a veces más importante que saber es ser pícaro. Y yo tengo bastante de pícaro por eso todavía estoy vivo a pesar de los tiros que me quisieron pegar y las palizas que me quisieron dar.
En la reunión les pregunte cuántos habitantes tenía Bolivia; creo que dijeron algo más de dos millones. Y en seguido les pregunté cuántos tenía la Argentina. Contestaron veinte y pico de millones. Entonces propuse que sacáramos el consumo per cápita de pescado de los argentinos, y les diéramos a los empresarios esos, el doble para Bolivia. Entonces empezaron a dar vueltas, que no, que se yo, y suspendieron la reunión. Dijeron la pasamos para otro día. ¿Saben lo que “pasaron” al otro día para poder hacer negociados? La secretaría de Pesca al ámbito de la Junta Nacional de Carnes. ¡Qué barbaridad! ¡Cómo van a pasar los pescados al tipo que vende puchero y bife de chorizo!
Yo me pregunto para qué sirven esos funcionarios, los funcionarios deben defender nuestros intereses, hay que estar atentos y controlarlos, defendernos de la corrupción.
Están destruyendo la pesca, pero la pesca es patrimonio de ustedes, de todos los argentinos, no pertenece a un funcionario, al capitán de un barco. ¡No! ¡Es de todos los argentinos! No puede ser que se estén muriendo de hambre nuestros chicos y dejemos en manos de las congeladores extranjeras nuestro recurso.
También les quiero hablar del tema de las privatizaciones. De Aerolíneas, ferrocarriles, etc. De toda la entrega del transporte nacional, los aviones, la marina mercante, las rutas, etc.
Hace un tiempo hablé en el homenaje a Martorano, ese gran patriota, y dije que los medios de transporte eran como el sistema circulatorio para nuestro cuerpo. Si yo me corto una artería, se muere una parte del cuerpo. Si yo entrego estos medios, se muere la Argentina. Piensen en cuántos pueblos quedaron aislados porque liquidaron el ferrocarril.
¡Qué cosas pasan en este país! ... Uno va a la Cámara de diputados y para ellos anda todo bien. Ahora vamos a ver si hacen algo con la deuda externa, si van a dar quórum para que se trate el tema de la deuda externa, porque si ellos no hacen nada...no sé...a nosotros nos queda seguir en esta lucha callejera en la que estamos con tantos amigos.
Fíjense que cosa: nadie nos difunde. La otra vez fuimos miles a la Plaza de Mayo, éramos como 40.000 con los piqueteros, el 2 de abril, y dijimos cosas importantes y denunciamos cosas gravísimas. Pero ningún medio dijo nada, acá hay también complicidad de los medios de comunicación¡son medios que están al servicio de la oligarquía y de los imperialismos!
Yo recuerdo que en este trajinar la vida, en esta lucha contra los que llamábamos entonces lo gorilas y los enemigos de la Patria, a mí se me acusó de una cosa muy grave: que yo armé al pueblo de La Pampa. Siendo Capitán me sublevé y como era pistolero, al frente de toda mi tropa, tomé el arsenal, las comisarías, el regimiento... en fin... todo. Y armé al pueblo.
Entonces dicen: “el loco de Philippeaux armó al pueblo”. ¿Y ellos no armaron los comandos civiles? ¡Esos eran asesinos! Iban esos tipos y agarraban a un muchacho peronista o de izquierda, lo secuestraban, lo tiraban por ahí o lo metían en la ESMA. Digo yo: Sr. Presidente ¿porqué no me pregunta a mi lo que pasaba en la ESMA que yo se lo puedo contar de cómo nos interrogaban? No, en vez de preguntarnos a los protagonistas, a los que luchamos, buscan al hijo, al primo, al nieto, la abuela, que se yo, cualquiera que no sabe un carajo... Que nos pregunten a nosotros, los que estuvimos presos...
Discúlpenme por expresarme de este modo, pero vivo indignado... es una injusticia... Qué barbaridad, mandaban a otros, porque ellos no iban, a secuestrar pibes peronistas, de izquierda...y resulta que ahora están con arresto “domiciliario”... ¡Acá no hay justicia!
Nosotros tenemos que seguir con nuestra prédica, en este sentido yo tengo que agradecer a esta revista CUADERNOS que publica todo lo que uno dice, porque otros medios no publican nada. ¡En Mar del Plata! ¡Qué barbaridad! Hay un gordito y petiso que maneja todo Mar del Plata, falta que maneje al cura. Va... no sé... ¡capaz que maneja hasta el cura!
Yo quiero agradecerles y pedirles disculpas por mis expresiones que son producto de la calentura contra las injusticias.
No aflojen, sigan luchando y yo me comprometo a seguir peleando.
Los abrazo con todo mi corazón.
Teniente Coronel Adolfo C. Philippeaux
12 de agosto de 2004
Fuente: Periódico del FORO PATRIÓTICO Y POPULAR