domingo, 29 de marzo de 2020

Una guerra popular y prolongada contra la pandemia. Con una economía al servicio del pueblo camino a la Independencia


LA HORA DE LOS PUEBLOS

Una guerra popular y prolongada contra la pandemia, con una economía en beneficio del pueblo, en camino a una Argentina Independiente

REPORTAJE A Horacio Micucci. 29-03-2020
 
Hemos hablado del Coronavirus desde distintos ángulos: en qué consiste la enfermedad, cómo protegerse, etc. ¿Cómo ves la situación actual?

Creo que lo más destacable es la participación protagónica del pueblo.
Ha sido publicado en los diarios que, en la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Rosario, en apenas 6 horas, se inscribieron 1.430 estudiantes para desarrollar tareas de cuidado y atención domiciliaria que se instrumentarán en breve. Desde el día 20 de marzo, su Área de Extensión y Territorio y #ComedoresUNR se encuentran trabajando en conjunto con la Municipalidad de Rosario y diferentes organizaciones sociales, para atender la demanda alimentaria de personas en situación de calle. Y en la Universidad de Buenos Aires se anotaron 4.000 voluntarios, principalmente estudiantes de Medicina, en 24 horas.
En centros de investigación Estatales se está buscando diseñar prototipos alternativos de equipos necesarios, que puedan ser fabricados de inmediato, como los respiradores UNRespiro en Rosario. Hay otras experiencias en curso de los bioingenieros argentinos, que pueden encontrar realmente la función para la que fueron entrenados, como en la Facultad de Oro Verde de la Universidad Nacional de Entre Ríos. No puedo evitar recordar aquellas propuestas de Mao, en la Revolución Cultural en China, de que los Centros Universitarios de Investigación, sin abandonar sus tareas, desarrollaran prototipos de avanzada en aspectos necesarios para el pueblo e incluso intentaran fabricarlos en pequeña escala.
Pero lo más emocionante e impactante es cómo el pueblo ha tomado en sus manos la campaña. Miles ayudan a sus hermanos, buscando llevarles lo que necesitan. En las fábricas, (como en el Astillero de Rio Santiago), desde los cuerpos de delegados, se ha avanzado en organizarse para participar. La Federación Nacional Campesina ha hecho sus propuestas para asegurar alimentos a los que los necesitan. Los Movimientos Sociales (en particular los Cayetanos, donde participa la CCC) están actuando en todos los niveles, demostrando su experiencia e importancia política y organizativa, con vistas al futuro: preparar y distribuir alimentos, fabricar los elementos de protección necesarios y distribuirlos, etc.
En la Provincia de Buenos Aires se inscribieron más de 9 mil personas y casi 1.800 voluntarios y voluntarias para trabajar en el sistema sanitario bonaerense. Entre ellos, durante el primer día de inscripción, hubo 134 médicos generalistas y 36 médicos clínicos. Los Veteranos de Malvinas también están actuando.
Ha sido una línea acertada del PCR, el PTP y la CCC, colocarse en la primera fila de esta Causa Nacional que es la lucha contra la pandemia. Yo veo que surgen los problemas y desde abajo, muy abajo, vienen soluciones e ideas, que debemos comunicar y extender. Se demuestra que en el pueblo reside la verdadera Nación, parafraseando a Ramón Carrillo.

¿Y cómo ves las medidas en curso y cómo continuar con el Aislamiento Sanitario?
Creo que, en general, las medidas del Gobierno han sido acertadas, pero se deben precisar algunos puntos para poder triunfar. Aquellos que siempre privilegiaron sus intereses antinacionales y antipopulares quieren poner en debate que se debe abandonar la lucha contra el coronavirus para que la economía no mate más que el virus. Es una falsa opción. De lo que se trata, al contrario, es de avanzar en medidas económicas que beneficien al pueblo. No se trata de economía o salud. Se trata de qué economía acompañará la emergencia sanitaria. Los viejos modelos han fracasado en toda la línea, en Argentina y en el mundo. En realidad, se trata de quién paga la crisis: los que se enriquecieron o los que han sido víctimas. Lo vemos en Brasil, en Chile, en EEUU y en Europa. Vemos como piensan y actúan los amigos de Macri.
Acá habría que profundizar ciertas medidas. Fijate que, en Francia, a las empresas en quiebra parece que las estatizan, y se propone un ingreso general básico pagado por el Estado y no se pagan los servicios, etc. Tal vez haya que pensar en estatizar esas empresas de servicios. En España se puso bajo conducción del Estado a la medicina privada y a los productores de medicamentos esenciales y en Irlanda se estatiza la medicina privada. Hay un mundo que muere y otro que quiere nacer. Hace falta la partera.

La pandemia pareció sorprender hasta a las potencias imperialistas ¿qué opinás?
Esta pandemia, ya hablamos de ello, podía ocurrir. El Director de la Organización Mundial de la Salud, el 11 de marzo de 2019, hace poco más de un año, alertó sobre ello. Había condiciones de vida de la población, en algunos lugares del mundo, que la hacían muy probable. Se generó en los de peores condiciones de vida y fue la intensa intercomunicación la que la difundió. Pero su magnitud tiene que ver con el abandono de la salud y la educación pública y los derechos del pueblo. Se nos dice que lo de Europa es porque es una población vieja y frágil (una selección natural maltusiana) pero la pregunta es: ¿por qué muchos eligen no tener hijos? Porque no los pueden mantener. Una guardería materno-infantil, en Argentina sale dinerales y todavía no se reglamentó la ley de los jardines materno infantiles del gobierno de la Sra. de Perón. Y los geriátricos son depósitos humanos y focos posibles.
Se viene la etapa final. ¿Cómo será la pandemia cuando llegue a los sectores que carecen de lo esencial, con desnutrición y una vida terrible?, en lo profundo del conurbano bonaerense y en el interior recóndito, en los originarios y en los humillados y vilipendiados de América Latina. Nuestra guerra contra el coronavirus será popular y prolongada.

¿Y respecto, específicamente, al Aislamiento Sanitario?
Es lo que digo. Debemos actuar según lo que el pueblo indique que pasa. Han sido acertadas las medidas iniciales y generales del Gobierno, pero hace falta más. En un departamento de lujo de Puerto Madero se tienen reservas. Pero hay que tener en cuenta las particularidades. Así como en el campo no es todo igual, lo mismo pasa en las ciudades y pueblos. En un barrio del conurbano profundo no se pueden aislar, en una habitación, ocho personas y sin medios. Yo creo que allí hay que mantenerse en los barrios (algo así como “el barrio es tu casa”), pero impedir que la pandemia penetre si no lo hizo y, si lo hizo, evitar que se extienda a otros barrios. Me parece que es obvio que hay que suministrar alimentos, agua potable, elementos de limpieza y protección, etc. Las estructuras gubernamentales deben actuar coordinadas con los Voluntarios y todos deben tener elementos de protección. Yo trabajo en Bioseguridad y el lema que siempre propuse fue “protegerse para proteger y proteger para protegerse”. Se formará así un ejército social contra la Pandemia, profesional y miliciano. Y en los centros urbanos va a haber que considerar a aquellos cuyas actividades de cuentapropistas quedan paralizadas. Yo creo que en los barrios hay que promover emprendimientos cooperativos para fabricar alimentos, elementos de protección (en Villa Jardín, en Lanús, hacen barbijos), alcohol, elementos de limpieza, arreglar viviendas, etc. Es decir, desarrollar una economía nueva para ese lugar y para extender. Los que sepan de costuras harán ropa de protección que está faltando. Las empresas textiles nacionales también. Pronto vendrá el frío y harán falta abrigos y zapatillas. Eso reactivará a Pymes y empresas nacionales.
Lo mismo ocurre en el campo. El Estado debe activar las economías regionales comprando su producción y desplegando una logística para llevarla allí donde haga falta. Pero esto exige transporte. Será el de los estamentos del Estado y los de los sectores de empresarios nacionales que trabajen en ese sentido y hasta los remiseros, dueños de camionetas y taxistas pueden ser parte de esa logística. Y, si hace falta más, habrá que intervenir a grandes empresas.
En suma, no es economía contra salud. Es guerra popular prolongada y una nueva economía en beneficio del pueblo. Si podemos lograr que algunos lugares vayan quedando libres de infección podrán producir, en el campo y en la ciudad, para los demás y también se reactivarán. Por eso es imprescindible evitar que algunos crean que esto es un feriado largo y vayan a contaminar zonas agrarias que necesitamos en producción. Es una guerra prolongada.
Se busca achatar la curva de crecimiento de la infección para poder absorber el golpe. Achatar la curva significa prolongar las medidas (prolongar la guerra), pero con derechos, no con guetos. Y con esta concepción, al contrario de lo que quieren hacer creer, se reactivará la economía del pueblo. Pero los que se enriquecieron hasta ahora deberán poner los fondos que necesitará el Gobierno. Surgen por todos lados muestras de las reservas populares, laborales, científicas y tecnológicas, que demuestran que lo que pensamos es posible. Despierta una Argentina que busca ser independiente.
Creo que estamos aprendiendo y podemos desplegar una experiencia que será un prototipo para el mundo. Ya el mundo nos está mirando.