jueves, 9 de mayo de 2019

EMERGENCIA SANITARIA Y EMERGENCIA ALIMENTARIA. Por Horacio Micucci


Apuntes y Reflexiones para un debate:

EMERGENCIA SANITARIA Y EMERGENCIA ALIMENTARIA:

dos elementos que deben analizarse conjuntamente como parte de un programa de propuestas de cumplimiento inmediato y simultáneo

Por Horacio Micucci
INTRODUCCIÓN. –
En el reciente informe del OBSERVATORIO DE LA DEUDA SOCIAL ARGENTINA de la Universidad Católica Argentina (UCA) titulado DOCUMENTO DE TRABAJO. POBREZA MULTIDIMENSIONAL FUNDADA EN DERECHOS ECONÓMICOS Y SOCIALES. ARGENTINA URBANA: 2010-2018, se presenta un nuevo concepto para medir la pobreza.
Se sostiene en ese documento que “…En la actualidad, la Argentina mide oficialmente la pobreza de su población a través de los ingresos corrientes de los hogares (método de Línea de Pobreza). Este tipo de medición de pobreza se basa en el supuesto de que los ingresos permiten a los hogares adquirir los bienes y servicios que necesitan para garantizar un mínimo de calidad de vida normativamente “aceptable”.”
Este concepto es cuestionado postulando “la necesidad de revisar el modo en que se mide la pobreza incorporando en el análisis múltiples dimensiones que complementen los ingresos. En este sentido, se afirma que la pobreza es mucho más amplia que la insuficiencia de ingresos y que tanto la pobreza como las condiciones de vida que experimentan las personas no pueden ser evaluadas de manera “indirecta”, incluso aunque se moneticen los recursos no monetarios.”
“Además, la consideración de múltiples dimensiones no solamente permite hacer visibles aspectos puntuales que marcan distintas situaciones y experiencias de privación, sino también dar cuenta de situaciones de pobreza de mayor intensidad en la que distintas privaciones se presentan de manera simultánea reforzándose entre sí y constituyendo situaciones de pobreza estructural.”
“Definida la pobreza como privaciones injustas que afectan el nivel de vida, las capacidades de desarrollo humano y las oportunidades de integración social de la población, el Enfoque de Derechos aparece como un criterio válido para definir un marco normativo a partir del cual establecer un conjunto de dimensiones de la pobreza.”
Esta perspectiva del estudio de la pobreza en Argentina, obliga a considerarla como el resultado de la sumatoria de distintas carencias.
En el documento del OBSERVATORIO, con este nuevo criterio, se estima la pobreza como la expresión de una multiplicidad de carencias, desde un concepto más abarcador que la sola consideración de los ingresos. De esta manera, se toman diversos indicadores de carencias.
Con esta concepción aparecen analizadas distintas dimensiones:
DIMENSIÓN ALIMENTACIÓN Y SALUD, incluye
 a) Inseguridad alimentaria que es sufrida por aquellos que redujeron de manera involuntaria la porción de comida y/o la percibieron de manera frecuente experiencias de hambre de algún componente del hogar por problemas económicos durante los últimos 12 meses.
b) Sin cobertura de salud y sin acceso a atención médica
c) Sin cobertura de salud y sin acceso a medicamentos

Otras dimensiones son: Acceso a servicios básicos, Vivienda digna (con detallados indicadores), Medio Ambiente, Accesos Educativos, Empleo y Seguridad Social.
Los Movimientos Sociales han planteado de manera reiterada y sostenida la necesidad de la Declaración de la EMERGENCIA ALIMENTARIA.
Recientes datos sobre aumentos en casos de tuberculosis, aumento de Enfermedades de Trasmisión Sexual (ETS), casos de sífilis congénita que indican la persistencia de esta enfermedad curable, pero, más aún, un claro indicador de serias carencias en la atención de la embarazada (que hubiera permitido evitar fácilmente este problema), en condiciones en que hay deficiencias crónicas en la estadística sanitaria donde infinidad de esos casos no son registrados. Porque, además, ese sector pobre es invisible a los ojos de la estadística y, también, al corazón de estos gobernantes.
Ese olvido estadístico se manifiesta en enfermedades como el Chagas. Clara enfermedad de la pobreza y calificada como enfermedad desatendida. 
Las cifras no están nada claras, ya que uno de los principales problemas de la dolencia es su infradiagnóstico, pero se calcula que en el país hay entre 1,5 y dos millones de enfermos.
Argentina es seguramente el que tiene más casos, no con más prevalencia, que sería Bolivia, pero con una población mucho menor. No sabemos cuántos existen realmente en Brasil y México. Sí conocemos que entre estos dos y Argentina suman más del 50% de los afectados del mundo y que menos del 1% reciben el tratamiento adecuado, a pesar de ser los países con mayor PBI de Latinoamérica.
En 2012, La ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD analizó estas enfermedades a las que llamó ENFERMEDADES DESATENDIDAS. Éstas lo son porque las poblaciones más pobres, residentes en zonas rurales remotas, barrios suburbanos marginales o zonas de conflicto, suelen ser las más afectadas por estas enfermedades, que persisten cuando hay pobreza y se concentran de forma casi exclusiva en las poblaciones pobres del mundo. Reciben poca atención y se ven postergadas en las prioridades de la salud pública porque los afectados carecen de influencia política. La inexistencia de estadísticas fiables también ha dificultado los esfuerzos por sacarlas de las sombras.
Todo lo anterior afecta, también el concepto de SEGURIDAD ALIMENTARIA  y SANITARIA que son aspectos indispensables de una DEFENSA NACIONAL PATRIÓTICO-POPULAR INTEGRAL E INTEGRADA para una Argentina Independiente de toda dominación extranjera. Recientes informaciones periodísticas dieron a conocer la cifra notable de aspirantes a soldados voluntarios rechazados, porque no cumplían con niveles mínimos de aptitud de salud.
Todo lo descripto anteriormente, tiene múltiples aspectos y múltiples implicancias, pero particularmente las humanas.
Ramón Carrillo sostenía que en el hombre argentino residía la verdadera Nación.  Esto es así aún desde el punto de vista del desarrollo agrícola industrial porque, de los dos elementos que componen las fuerzas productivas del país, los instrumentos de la producción y el ser humano que trabaja en ellos, estos últimos son los más importantes.
Estos apuntes parten de las concepciones expresadas en el siglo XIX por quien fuera el padre de la Medicina social, el alemán Rudolf Virchow y por uno de los más eminentes sanitaristas argentinos, Ramón Carrillo, de quien se citan frases pero poco se aplica de sus concepciones.
Además, este bosquejo se apoya en las concepciones que rescatan a Virchow y destacan la necesidad del empoderamiento (empowerment) de los sectores empobrecidos que incorporan las modernas teorías de la Medicina Social. Empowerment significa empoderamiento y, en términos sencillos y prácticos, es darle más poder al pueblo, delegar autoridad a los empleados para que puedan decidir sobre su propio trabajo y encuentren menos barreras en la ejecución de mejoras, solución de conflictos, etc.
EMERGENCIA SANITARIA UNIDA A EMERGENCIA ALIMENTARIA. –
Todo lo anterior implica definir algunos aspectos mínimos y urgentes de acción simultánea que un nuevo Gobierno de Emergencia (y de Emergencias) debiera adoptar de inmediato.
1.- Ningún niño, ningún anciano, ninguna embarazada, ningún habitante sin atención médica preventiva, curativa y de rehabilitación.
a)           Fortalecimiento de las estructuras públicas con presupuesto y cargos adecuados: Hospitales y Unidades Sanitarias. Aumento de las Unidades Sanitarias. Especial desarrollo de estas últimas que son fundamentales en la Estrategia de Atención Primaria de Salud. Médicos generalistas, en lo inmediato, con turnos de 8 horas, pero cubriendo las 24 horas, por Unidad Sanitaria; pero tendiendo a un sistema con médicos clínicos, pediatras y ginecólogos cubriendo la jornada. Fortalecimiento del cuerpo de enfermería. Entrenamiento de agentes de atención primaria entre la población de cada barrio de la zona de influencia de cada Hospital, cumpliendo funciones de atención y control del estado sanitario de la población. Seguimiento especial de la salud materno infantil con los controles sanitarios que impidan la ocurrencia de eventos no deseados y evitables. Controles periódicos de la madre y suministro de medicamentos necesarios. Recuperación del sistema de manzaneras y comadronas, corrigiendo los desvíos que malograron su función en la Atención de las necesidades de los barrios. Integración, con capacitación y supervisión en la actividad, de enfermeras “practicas”. Educación sexual en barrios y escuelas. Utilización de la capacidad técnica y logística de las Fuerzas Armadas, con presupuesto adecuado. Acuerdo para la acción coordinado con organismos gremiales de profesionales y de otros trabajadores de la salud.
b)           Aquellos que tengan Obra Social deberán ser atendidos como es necesario. La calidad de la atención medica es el cumplimiento de uno de los derechos del pueblo. Eso debe ser controlado por organismos de usuarios del sistema (incentivando tal organización) combinadas con estructuras estatales. El dinero de las Obras Sociales es de los afiliados a las mismas. El Estado no debe apropiarse de ellos ni hacer uso para extorsión política de ellos, pero su uso no deberá ser desviado para otros objetivos. Se promoverá que los cuerpos de delegados sean organismos de control. Acuerdo con sindicatos y obras sociales para integrarse en la emergencia.
c)            Pero la Emergencia deberá prestar especial cuidado con quienes carecen de atención y teniendo en consideración que sin alimentación no puede haber salud. Reestudio para aplicarla adaptada a circunstancias actuales de la experiencia realizada en Florencio Varela en los años 70 y de otras similares. Revalorizar, con correcciones de los aspectos negativos que motivaron su fracaso, de la experiencia del Seguro Público de Salud de la Provincia de Buenos Aires entre los años 2004-2008; en especial sus mecanismos de notificación y vigilancia epidemiológica, que permitirían una medicina preventiva si fueran correctamente desarrollados.
d)           Todos los niños deberán concurrir a establecimientos educativos de jornada completa. Los sábados y domingos serán lugares de alimentación y diversión de los niños.
En ellos recibirán raciones especialmente diseñadas para asegurar su alimentación, suministrados por el Estado. Los organismos universitarios de enseñanza de Nutrición de las Facultades de cada zona, serán encargados del control nutricional y calidad de los alimentos suministrados. Los alumnos de las carreras de Nutrición tendrán, como parte de su formación, esta actividad. Los niños necesariamente recibirán los controles pediátricos y la vacunación indispensable. La vacunación y la atención médica deberán buscar a los necesitados, asumiendo una posición activa.
Se partirá del principio de que un niño con hambre no puede aprender.
Se deberá reglamentar, al fin, la ley de Jardines Maternales del gobierno de la Sra. de Perón; ley nunca reglamentada y que, hace pocos meses, una resolución judicial exigió al gobierno hacerlo, aunque sin éxito hasta ahora.
Se nombrará personal docente adecuado en número y especialidad, con salarios justos. La necesidad de cargos docentes se verá incrementada, al revés de lo que afirman especialistas como Alieto Guadagni que sostienen que sobran.
Se habilitarán lugares para cumplir cabalmente esa función. Se establecerá y promocionará la colaboración de Sociedades de Fomento, Comedores barriales, Clubes, y otras estructuras de los barrios, etc. Las instituciones sociales y deportivas que colaboren con sus instalaciones, serán favorecidas con exenciones y ayudas en los gastos de mantención de las mismas, dado que son un elemento clave de integración social y desarrollo cultural y deportivo (y teniendo en cuenta que hoy son destruidas por brutales exigencias impositivas y tarifarias).
Se promoverá el control de estas actividades por parte de organizaciones barriales, para que sus fines no sean desvirtuados.
Se reflotarán experiencias como los campeonatos EVITA, aprovechando para realizar allí controles médicos y nutricionales a los niños.
e)           El PAMI deberá cubrir al 100% las necesidades de sus afiliados, que recuperarán la dirección de la institución. Se efectuará un estricto control de precios de los medicamentos e insumos médicos. Las ganancias de los laboratorios deberán ser auditadas por organismos de los consumidores, Obras Sociales y Universidades.
2.- Convocatoria nacional de profesionales, técnicos, enfermeras y demás trabajadores de la salud
a)           Se llamará a concurso para cubrir cargos en todas las tareas anteriores. Pero dada la Emergencia Sanitaria se convocará a médicos que estén dispuestos a atender en sus consultorios particulares, si se encuentran en zonas críticas. El Estado suministrará locales en esas zonas o acordará con las estructuras barriales (Sociedades de Fomento, Clubes, casas particulares que se ofrezcan para ello, etc.)  el uso de las mismas a cambio de aportes, ayudas y exenciones impositivas y tarifarias. Los que se integren, ingresarán a la Carrera Médica Hospitalaria, recibirán sueldo, derechos laborales y relación de dependencia. De la misma manera se procederá con otros trabajadores de la salud.
b)           Los profesionales, enfermeros y otros trabajadores de la sanidad, jubilados que quieran incorporarse, seguirán cobrando su jubilación, y nadie podrá impedirles integrarse al sistema de Emergencia Sanitaria Nacional, tener los mismos derechos que los otros incorporados y cobrar por su trabajo, SIN PERDER LA JUBILACIÓN.
c)            Ningún trabajador pagará impuesto a las ganancias por su labor.
d)           Como se dijo, se entrenarán agentes de atención primaria de salud, y se hará lo mismo con los trabajadores prácticos existentes (enfermeras “prácticas”, comadronas, etc.). Su actividad será supervisada y será paralela a su educación formal y titulada en tanto cumplan con la formación y desempeño.
e)           Acuerdo con la CONFEDERACIÓN FARMACÉUTICA ARGENTINA (COFA) para que todas las farmacias, suministren los medicamentos que les haga llegar el Estado a los que no tengan cobertura. Esos farmacéuticos cobrarán un monto fijo por dispensar los medicamentos gratuitos que les suministre el Estado.
f)             Acuerdo con la Confederación Unificada Bioquímica de la República Argentina (CUBRA) para la atención bioquímica con un sistema a coordinar (capitado o con pago por práctica). Se privilegiará a los laboratorios periféricos de zonas críticas. Lo mismo con los organismos de odontología y otras profesiones.
g)           Medicamentos. Se promoverá la fabricación de los mismos en los Laboratorios de la Red Estatal, de las estructuras universitarias existentes como las de la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad Nacional de La Plata y de los hospitales. Se promoverá el desarrollo de un área específica en Fabricaciones Militares, reactivada y ampliada, como parte de la Seguridad Sanitaria de la Defensa Nacional. Se promoverá la fabricación de medicamentos magistrales en las farmacias, bajo control de calidad de estructuras profesionales como el Laboratorio de Control del Colegio de Farmacéuticos de la Provincia de Bs. As.
h)           Acuerdos con los laboratorios farmacéuticos nacionales que se quieran integrar.
i)             Fortalecer los organismos de control de fabricación de medicamentos, alimentos y tecnología médica que están siendo vaciados, como el ANMAT.
j)             Movilizar a las universidades. Las carreras sanitarias serán impulsadas a estudiar e investigar integrándose al sistema de emergencia. Que cada estudiante sea un agente de atención primaria, una parte de su tiempo. Lo que aprendan trabajando, se computará para su aprobación del título. Recibirán una beca para favorecer su continuidad en estudios, evitando que deban trabajar en tareas ajenas a sus carreras, y se otorgarán títulos intermedios, según lo que aprendan trabajando. Las tareas tendrán puntaje para licenciaturas, maestrías y doctorados.
3.- Fondos para la Emergencia Sanitaria.
En líneas generales, serán obtenidos de impuestos de emergencia a los que se enriquecieron con la crisis. Sólo a modo de ejemplo, se dan algunos datos.
a)           El capital financiero deberá aportar una parte de esos fondos, por legislación especial.
b)           Un país en Emergencia Sanitaria y Alimentaria no puede pagar la deuda externa, pago que debe ser postergado, para ser antes estudiada para eliminar la ilegal, usuraria, ilegítima y odiosa.
c)            Los monopolios petroleros han cobrado valores que superaron tres veces sus costos internos. Esto significó valores de unos 10.000 millones de dólares al año. La energéticas obtuvieron ganancias inmensas a costa del pueblo y el desangre nacional.
d)           La fuga de capitales en tres años ha igualado al préstamo del FMI.
e)           Los latifundistas, opresores del verdadero productor agrario, pagarán impuestos acordes con sus riquezas hasta que una Reforma Agraria, que cree un millón de chacras mixtas de campesinos propietarios, ponga las cosas en su lugar. Los latifundistas extranjeros pagarán impuestos especiales.
f)             Se podrán obtener alimentos con acuerdos con las economías regionales y productores del campo, evitando la intermediación que encarece muchas veces los que se paga al productor. Recibirán pagos justos y no se tirará su producción. De esta manera se obtendrán alimentos necesarios a un costo justo.
g)           Etc.
Todo lo anterior es un borrador para el debate. Pero parte de la necesidad de ir estableciendo pautas programáticas para resolver las urgencias del pueblo y la Patria.