SOBRE EL PROYECTO DE LEY DE SOBERANÍA HIDROCARBURÍFERA, LA EXPROPIACIÓN DEL 51% DE LAS ACCIONES DE REPSOL EN YPF Y LOS SUPUESTOS CAMBIOS DE RUMBO DE GOBIERNO NACIONAL.
Horacio Micucci
Nos encontramos escribiendo un documento extenso y profundo sobre los hechos de dominio público respecto a la política petrolera argentina que daremos a conocer próximamente. Todos conocen nuestra lucha de décadas por la Estatización Total del petróleo desde el subsuelo al surtidor. No obstante, ante el debate abierto, me parece oportuno manifestar algunas consideraciones.
LOS HECHOS
1.- El día 16 de abril de 2012, la Sra. Presidente anunció la expropiación del 51% de las acciones de REPSOL en YPF. Se anunció que de ese 51%, a su vez, el 51% quedará en manos del Estado Nacional y el 49% restante en manos de las Provincias petroleras. No serán tocadas las acciones del Grupo Ezquenazi, ni las acciones que se cotizan el Bolsa.
2.- Simultáneamente, por un Decreto de Necesidad y Urgencia, el Gobierno Nacional intervino YPF, asumiendo su conducción.
3.- En el artículo 1 del Proyecto de Ley de Soberanía Hidrocarburífera, se establece que “Declárase de interés público nacional y como objetivo prioritario de la REPÚBLICA ARGENTINA el logro del autoabastecimiento de hidrocarburos, así como la explotación, industrialización, transporte y comercialización de hidrocarburos, a fin de garantizar el desarrollo económico con equidad social, la creación de empleo, el incremento de la competitividad de los diversos sectores económicos y el crecimiento equitativo y sustentable de las provincias y regiones.” Además la Presidente, en su discurso, puso énfasis en declarar que: “el modelo además que hemos elegido no es un modelo de estatización, que quede claro, es un modelo de recuperación de la soberanía y del control de un instrumento fundamental, porque seguimos conservando la forma de sociedad anónima, seguimos funcionando de acuerdo a la ley de sociedad privada.”. Agregó, además, que: “En cuanto la dirección sea llevada por los argentinos no tenemos que tener prejuicios de que bajo la forma de joint ventures, de unidades transitorias de empresas y de todas las modalidades modernas de negocios que hoy imperan en el mundo podamos asociarnos con otras empresas estatales, con empresas privadas, con capitales nacionales, pero tengan en claro que ese 50 por ciento no va a ser manejado por ningún grupo económico, ni local ni nacional, porque debe ser manejado por el Estado Nacional asegurando a través de la profesionalización del management que vamos a tener recursos y que va a ser rentable.”
4.- Ha quedado absolutamente claro, por las cifras difundidas en estos días, que se ha confirmado el fracaso total de todas las variantes de las líneas políticas privatistas ensayadas, por décadas, en la conducción y gestión de nuestra política petrolera. Todas las cifras, que hemos difundido durante años demostrando eso, se han visto confirmadas. Hoy se reconoce que el costo del barril de petróleo en boca de pozo en Argentina es (según las distintas versiones) de entre 6 y 12 dólares, y que ese mismo petróleo era puesto en destilerías a valores de entre 50 y 60 dólares. Se demostró que no se invierte en exploración porque es la parte onerosa del negocio petrolero y que esas ganancias fueron sacadas del país. En efecto, como en ningún país en el mundo, se remitieron al exterior (con la anuencia del representante del Estado en el Directorio de YPF) el 90% de las utilidades. Es más, en los últimos años se remitieron al exterior 105% a 135% de las utilidades, lo que implica que se sacó más que las ganancias declaradas, en una clara maniobra de evasión impositiva y vaciamiento. Y que esas utilidades remitidas fueron a REPSOL ESPAÑA para comprar áreas y pozos en zonas redituables del mundo. La remisión de utilidades se hizo permitida y autorizada por este Gobierno con las excusa de pagar la parte que compró el Grupo Ezquenazi (grupo de “amigos”, en ese entonces, del Gobierno que compro sus partes sin dinero o, mejor dicho con las ganancias futuras remitidas al exterior libremente). Así creció REPSOL, así Esquenazi se hizo petrolero y operador de YPF (con la anuencia y el apoyo de este Gobierno). De esa manera YPF fue literalmente vaciada; unas vez más y, esta vez, con anuencia e impulso kirchnerista. Se ha perdido el autoabastecimiento y se importan combustibles por valores de más de 10.000 millones de dólares al año. Esta expropiación de las acciones de Repsol en YPF se produce como consecuencia de una crisis terminal, entre cuyos responsables está el propio Gobierno. Y los responsables, públicos y privados, todavía están impunes sin que nada haga presumir que serán castigados.
5.-Mientras esto ocurre, la segunda petrolera del país, Panamerican Energy que es 60% de la British Petroleum (de los ingleses que ocupan nuestras Malvinas) y 40% del Grupo Bridas (50% de Bulgueroni que explota en el Mar Caspio con consentimiento y control ruso) y CNNOC (empresa estatal china) ha salido indemne. Lo mismo el 67% de la producción de crudo que está también en manos privadas. CIFRAS DE 2011: YPF-REPSOL=34,9%, Panamerican Energy= 19,5%, Petrobras=6,8%, Pluspetrol=6,6%, SINOPEC (Estatal China socia de REPSOL en Brasil)=6,5%, Chevron (yanqui)=5,6%.
EL DEBATE
1.- Desde ya que para quienes por años luchamos por la estatización total de nuestro petróleo en todas las etapas de la cadena productiva, las recientes medidas, aunque sean parciales, insuficientes y contradictorias, suenan a música celestial a nuestros oídos. Pero también sabemos quienes aprendimos al lado de maestros y luchadores como el Dr. Adolfo Silenzi de Stagni, que hubo períodos de estatización parcial y, más aún, de estatización con privatización disfrazada, que permitieron el surgimiento de poderosos petroleros actuales como Bulgueroni. Es más, fue la política de este gobierno, más recientemente, la que hizo que advenedizos “amigos” como Cristóbal López y Lázaro Báez de convirtieran en petroleros. Petroleros que hoy son importantes en Argentina y que, junto a monopolios imperialistas extranjeros, pueden ser esos inversores extranjeros o nacionales de los que habló la Sra. Presidente.
2.- Más aún, podemos afirmar que esas políticas de estatización parcial o privatización disfrazada, iniciaron el camino de rapiña de nuestro petróleo y fueron el abono necesario para la total privatización petrolera argentina.
3.- Vemos con preocupación que, con presumible honestidad pero, a nuestro juicio, apresuradamente, muchos luchadores de la causa del petróleo argentino califican lo que está ocurriendo, como un cambio de 180 grados. Hay quien evalúa que hay una corrección de la política petrolera del Gobierno para retomar un camino mosconiano.
4.- Parece que algunos creen que el gobierno ha cambiado. Nosotros no tenemos evidencias científicas para creer que esto es así. Estas mismas nuevas resoluciones pueden fundamentar el surgimiento de una nueva “Patria Contratista” cuya voracidad ya conocimos o, peor aún, fortalecer a monopolios como Bulgheroni (socio de la inglesa British y de los chinos) o, abiertamente, a otros monopolios imperialistas extranjeros. Efectivamente, ya se habla de monopolios estadounidenses interesados en “el negocio”. Queremos recordar que la empresa estatal de Angola esta asociada a la empresa China Sonangol International Holding Limited. Esta última, con sólo el 34% de las acciones, utiliza a la sociedad para la penetración china en África.
5.- Queremos hablar claro: Algunos creen que, de la noche a la mañana, un gobierno que representa, en sus medidas, los intereses de un sector del empresariado de intermediación (nativo pero no nacional) asociado a diversos intereses imperiales (generalmente de imperios competidores de los yanquis) se ha convertido por arte de magia, en un empresariado nacional reformista (como el surgido en el período del General Perón). No compartimos esa creencia. Queremos dejar esto claro. Las medidas del periodo del matrimonio Kirchner se caracterizaron (como la misma Presidente lo ha reconocido) en una primarización de nuestra economía (mientras se agitan banderas de industrialización), desnacionalización de la misma, promoción de monopolios imperialistas de minería contaminante (que también son parte de la explotación de nuestros territorios colonizados por los ingleses), extranjerización de la tierra, crecimiento del latifundio, pago de la deuda externa usuraria, ilegítima y fraudulenta, persecución y castigo a los pueblos originarios. Y nuevas leyes de persecución al pueblo como la ley antiterrorista y las labores de inteligencia sobre luchadores populares. En suma: remache y profundización de la dependencia que es la causa del estrangulamiento actual.
6.- Por lo tanto, la lucha por una total estatización petrolera, en el marco de una Proyecto Político Patriótico y Popular verdadero, sigue vigente y necesita de la fuerza y el protagonismo de todo el pueblo para hacerse realidad.
REAFIRMAMOS NUESTRA LUCHA Y NUESTRA CONSIGNA:
“EL PETRÓLEO ES NUESTRO”
ESTATIZAR SIN INDEMNIZACIÓN, DESDE EL SUBSUELO AL SURTIDOR. Por la propiedad y gestión estatal, monopólica y eficiente, en todos los eslabones de la cadena productiva, desde la exploración a la comercialización, con control de sus obreros y técnicos y del pueblo argentino, de todos los hidrocarburos líquidos y gaseosos de la Argentina.
Repudio y respuesta a toda sanción o presión imperialista (española o de donde venga) por ejercer nuestra soberanía petrolera.
Derogación de toda la legislación privatista menemista y las leyes promovidas por este gobierno como la llamada “Ley Corta”.
Por una nueva ley de hidrocarburos (que reemplace la ley vigente que data de la Dictadura de Onganía), y que establezca los principios anteriores.
Llamamos a constituir un amplio Movimiento Nacional y Federal en cada ciudad, en cada pueblo, en cada provincia para lograr estos objetivos, rescatando las ideas y los hechos de los Generales Mosconi y Baldrich y del Dr. Adolfo Silenzi de Stagni y las banderas del Movimiento Nacional de Defensa del Petróleo Argentino (MONADEPA) que presidiera este último insigne patriota.
“No admitimos ningún tipo de transacción con este principio. No creemos en la “ayuda” de las compañías privadas, sean extranjeras o nacionales, y es por ello que estamos enfrentados a toda la política económica y petrolera del actual gobierno. La defensa del petróleo no es más que un frente de lucha por la liberación nacional de manera que no parcializamos lo que debe ser una auténtica liberación política, económica y social del pueblo argentino. Si concentramos nuestro esfuerzo en esta sola trinchera es porque la consideramos, sin duda alguna, la más importante.”.
Dr. Adolfo Silenzi de Stagni.
“...la experiencia de las luchas incesantes que la organización fiscal ha debido soportar con las compañías privadas durante todo el tiempo en que la hemos dirigido, nos condujo a la conclusión de que tales organizaciones, la fiscal y la privada, no pueden coexistir, pues representan dos intereses antagónicos destinados a vivir en lucha, de la cual sólo por excepción saldrá triunfante la organización estatal. Resulta inexplicable la existencia de ciudadanos que quieran enajenar nuestros depósitos de petróleo acordando concesiones de explotación y exploración al capital extranjero, para favorecer a éste con las ganancias que de tal actividad se obtienen, en lugar de reservar en absoluto tales beneficios para acrecentar el bienestar moral y material del pueblo argentino. No queda otro camino a adoptar que el monopolio del Estado pero en forma integral, es decir, en todas las actividades de esta industria: la producción, elaboración, transporte y comercio.”
General Enrique Mosconi