miércoles, 8 de abril de 2020

PASCUA Y PESÁH

PASCUA Y PESÁH


Durante estos días de confinamiento, es muy probable que haya llegado a sus teléfonos móviles y a sus correos este poema atribuido a K. O’Meara y supuestamente data de 1800, el mismo año en el que hubo la gran epidemia de peste, aunque la gripe española fue en 1918, época a la que parecen corresponder las fotos que acompañan al envío.
Sin embargo, en las últimas horas se ha sabido que no fue escrito entonces. Su autora es Kitty O’Meara, una antigua maestra y asistente espiritual en hospitales y hospicios de Estados Unidos que se ha inspirado para escribir este texto durante la pandemia actual de coronavirus.

COMPARTO EL POEMA QUE, INDEPENDIENTEMENTE DE SU ORIGEN, TIENE VALOR…

EN TIEMPOS DE PANDEMIA
Y la gente se quedó en casa.
Y leyó libros y escuchó.
Y descansó y se ejercitó.
E hizo arte y jugó.
Y aprendió nuevas formas de ser.
Y se detuvo.
Y escuchó más profundamente. Alguno meditaba.
Alguno rezaba.
Alguno bailaba.
Alguno se encontró con su propia sombra.
Y la gente empezó a pensar de forma diferente.
Y la gente se curó.
Y en ausencia de personas que viven de manera ignorante.
Peligrosos.
Sin sentido y sin corazón.
Incluso la tierra comenzó a sanar.
Y cuando el peligro terminó.
Y la gente se encontró de nuevo.
Lloraron por los muertos.
Y tomaron nuevas decisiones.
Y soñaron nuevas visiones.
Y crearon nuevas formas de vida.
Y sanaron la tierra completamente.
Tal y como ellos fueron curados.               

El término Pascua viene del idioma hebreo (pesáh) y del griego (pascha). La palabra "Pascua" en español significa "paso", "salto".
Me dicen que, según las Sagradas Escrituras, con la Pascua Dios da a los cristianos la esperanza por la resurrección y por una nueva forma de vida, representada en el regreso de Cristo de entre los muertos. O sea, un salto a una nueva vida…
Me dicen que los judíos conmemoran la Pascua (Pésaj) como una de sus principales fiestas en la que recuerdan el paso que dio el pueblo hebreo junto con Moisés a través el Mar Rojo. O sea, un paso de su esclavitud, en ese momento, a su libertad…
Como ateo, no vale mucho mi opinión, pero quiero creer que tal vez sea bueno pensar que esta Pascua pueda ser un salto o paso a la libertad de tantas cosas que nos dijeron que eran ciertas y son mentiras, y son, en realidad, esclavitud.
Y un paso a una Argentina donde el hombre no sea lobo del hombre, en un mundo donde un puñado de potencias no sean lobos de otros países, pueblos y naciones...

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